dave krugman
LOS
GATOS DE ALDABURU
A
María Inés, en Buenos Aires
Los
gatos son constantes vertebradas en el tedio. Los gatos,
en
instinto, son preguntas.
¿Cómo
ensanchan ambas córneas en lo oscuro cuando inquieren por el iris de un espejo?
Su
mutismo sibilino es lo que intriga, pero en toda la egipcíaca estructura: ¿cómo
pudo no escurrirse por las grietas la misiva tan felina de una mole?, ¿cómo
pasa por los tantos estados de materia (va de pez a pedestre al aerostato)?
¿Eran
cartas de amor las que escribía? La respuesta se desliza en los tejados.
RECICLANDO
UN TOKONOMA
Ese gato que yo
soy por todos los rincones
Martín
Adán
Aurora
boreal brotando por un roble: simple ley de afinidades y dialéctica podrida.
Bajo la acción del cielo amanece lo polar cercado en el origen del caos y de lo
amorfo. El sol parece nulo, factor de un culto exógeno (como si fuera el orbe
que describe Anaximandro). Pero sólo es el efecto momentáneo de la luz: un
maullido de inmediato lo echa a andar.
GATO
POR FIEBRE
...el bosque maúlla
Aimé
Césaire
Nada
logra serenarse –y esta noche es de tormentas. El viento (que, con varas,
corrompe las ortigas) parece que se estanca, condensa en las cortinas con
índole viciosa.
Un
macizo, en la etapa etérea y árida, recibe luz en sesgo y se suma a la silueta
estival de una pared.
Su
fantasma es transitorio: hallo un nuevo morbo, frío, cuando (con repliegue
oscuro) se proyecta sobre mí.
Rebote
del gato muerto:
Cuando los precios de las acciones se recuperan brevemente en un momento de
caída libre o incertidumbre, se conoce como un “rebote del gato muerto”. Esto
proviene de la noción de que incluso un gato muerto rebotará si cae desde una
altura suficiente. La recuperación del mercado tiende a ser breve y temporal, y
la caída tiende a reanudarse. (Artículo de Cora Lewis para APNews, abril 9 de
2025)

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